Se recomienda ir a un notario y legalizar el contrato, como también la firma de todas las páginas del contrato por el arrendador como el arrendatario, así evitarás cualquier sustitución y es una medida que aporta una seguridad adicional al contrato y a su cumplimiento.
Cuando se va a alquilar un inmueble siempre es necesario legalizar en Notaria el Contrato de Arrendamiento en el que se indique con precisión cuáles son los compromisos que adquiere cada parte.
De esta manera, tanto arrendador como arrendatario conocen de manera clara cuáles son sus obligaciones al mismo tiempo que obtienen protección legal.
Para el arrendatario
Cuando se celebra un contrato de arrendamiento ante Notario, el arrendatario puede saber cuál es la condición del inmueble que quiere alquilar tanto en el estado general del mismo como su estado legal.
En cuanto a las condiciones físicas del inmueble a la hora de firmar el contrato este puede incluir evidencia fotográfica de su estado.
De este modo, quien alquila tiene la tranquilidad de que al culminar la relación contractual no se le quieran exigir cargos por daños preexistentes en los elementos estructurales, fontanería o electricidad.
En cuanto al estado legal del inmueble, el arrendatario puede tener conocimiento sobre si el arrendador es el legítimo dueño o si por el contrario, está en proceso medida judicial que a la larga podría perjudicarle.
Un contrato de arrendamiento notariado también le transmite tranquilidad al arrendatario en caso de que la propiedad pase a la titularidad de otro propietario.
En este caso, el nuevo dueño está en la obligación de respetar las condiciones del contrato y debe mantener la continuidad del alquiler en los términos acordados.
Este puede ser el caso de viviendas que estén bajo ejecución hipotecaria. Si se cuenta con un contrato de arrendamiento notariado, el arrendatario que suele ser la parte débil obtiene protección legal y no puede ser desalojado en términos distintos a los establecidos en el documento.
Para el arrendador
Uno de los problemas más frecuentes a los que se enfrenta un arrendador es que el inquilino no cumpla con la obligación de pagar el alquiler en la fecha acordada.
Por lo general al propietario del inmueble le toca recordar los atrasos al arrendatario, para seguir con las advertencias.
Si no existe un contrato de arrendamiento notariado resulta muy difícil ejecutar alguna medida judicial eficaz bien sea para que el inquilino se ponga al día o para ordenar su desalojo por impago.
Este tipo de situaciones que, además de ser muy incómodas ocasionan muchas molestias y pérdida de tiempo pueden evitarse dejando asentado en una o más cláusulas las responsabilidades del arrendatario y las consecuencias de no cumplir con ellas.
Al momento de redactar un contrato de arrendamiento, el notario ofrece asesoría a ambas partes para que los términos de la negociación sean favorables tanto a los intereses del arrendador como a los del arrendatario.
En el propio contrato de arrendamiento, el arrendador puede incluir cláusulas que indiquen la manera en la que se procederá de forma extrajudicial en caso de que el inquilino no cumpla con el pago de las mensualidades.
A continuación te indicaremos los requisitos que debes cumplir para legalizar un contrato de alquiler en Perú:
- Contar con el documento de identidad el cual debe estar vigente y en buen estado para poder ser aceptado por el organismo que lo procesara.
- Si eres extranjero debes contar con la autorización de permanencia en el país el cual se mostrara en conjunto con el pasaporte de viajero. El mismo también es conocido como Permiso para ciudadanos extranjeros que se encuentran en trámites legales de residencia temporal o permanente en Perú.
- Si el contrato se establecerá mediante una empresa, esta debe contar con un representante legal que suministrará toda la documentación de la misma. Este deberá consignar la copia de su documento de identidad y todo lo relacionado con el poder otorgado por la empresa para fungir como apoderado.
- Como requisito indispensable, el arrendador debe consignar copia de las escrituras del inmueble para corroborar tanto la dirección como el propietario de inmueble descrito. Con estas escrituras se concreta la firma y autentificación del contrato de alquiler por un tiempo determinado.
- De igual forma los solicitantes deben tener plena disposición para colocar sus huellas dactilares en el contrato de arrendamiento. Con esta se da conformidad de las partes involucradas de la activación de dicho contrato por la vía legal.
- Se requiere incluir en dicho contrato a dos testigos, los cuales deben corresponder a cada parte involucrada y estar al tanto de la negociación. Para ello deben de igual forma leer, firmar y colocar sus huellas dactilares para dar por concretado el mismo.
Con el cumplimiento de estos requisitos necesarios para legalizar un contrato de alquiler en Perú, ya puedes iniciar el proceso para alquilar y estar dentro de la ley.